Algo sobre salmones y agua dulce

El WWF presentó el informe “Salmonicultura en los lagos del sur de Chile, Ecorregión Valdiviana, historia, tendencias e impactos ambientales”. En él se expresa que los factores que generan más daño son los alimentos no consumidos y las fecas de los peces, además de los salmones fugados de los centros de cultivo. Además, explica que la salmonicultura, junto con las descargas de aguas servidas de asentamientos humanos son las principales fuentes de ingreso de nutrientes (fósforo y nitrógeno) al ecosistema, los cuales degradan la calidad ambiental de las aguas, permitiendo el crecimiento de algas que absorben el oxígeno y matan a la fauna nativa. Además, los salmónidos silvestres fugados de las jaulas de cultivo se convierten en predadores de la frágil fauna nativa, e incluso los contagian con enfermedades propias de estos peces. Asimismo, la presencia de antibióticos y químicos en el agua empleados en la producción de salmones se constituye en otro riesgo ambiental para la fauna nativa. Por último, de las 7 especies invasivas descritas en los lagos y ríos de valdivia, 5 corresponden a salmones.

Cabe destacar que los centros de cultivos creados previo a 1991 no pasaron por el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (que es malo pero al menos es algo), por lo que no poseen límites de producción por ejemplo (entre los años 1984 y 1991, el gobierno entregó 51 concesiones para el cultivo de salmones en 16 lagos de la ecorregión valdiviana).

Y como último detalle, el 60% de la producción de salmones en Chile se efectúa en agua dulce...

$$$$$eutrofización acelerada$$$$